Vuelta a la cordura.

Y aquí estoy de nuevo, tan cuerdo como antaño, pero tan incomprendido como siempre.
Y recordé cómo se consigue la felicidad, ¡enserio!, aunque siento el vacío que me recuerda la pérdida de una vida propia. Porque no es el destino lo que poseo, sino una necesidad irremediable.

Yesterday.

Y aquí estoy, culpándome de todo, una vez más, pero siempre con razón. Ya no pretendo nada, sé que nunca lo merecí, ni siquiera cuando realmente te demostré quién soy, y eh, créeme cuando te digo que soy como creías que era.

http://www.youtube.com/watch?v=XpzwuXn9bog